Abierto hoy de 11:00 a.m. a 6:00 p.m.

Exposición Kalabongó

Kalabongó

En algunas zonas recuerdan que los cimarrones (término colonial para referirse a esclavizados fugitivos) volaban sobre las tierras, combatían tropas y defendían los primeros palenques. El título de esta exposición deriva de un universo alegórico en el que las luciérnagas (kalabongó en lengua palenquera) son los africanos huidos que luchan con murciélagos (colonos) en una batalla en la que la oscuridad es cómplice de la libertad.  Kalabongó pregunta por el sentido de las imágenes para una sociedad, y de las prácticas artísticas como herramientas para la acción política, la reivindicación histórica, y la recuperación y reconstrucción de saberes locales vinculados con cosmogonías ancestrales.

Curaduría: Ana Ruiz Valencia

Calendar Del 26 de abril 2024 al 01 de septiembre del 2024
Artistas: Jorge Panchoaga + Konda Ku Monikongo (Diego Casseres, Diógenes Rafael Cabarcas Zurita,Liliana Paola Cassiani Márquez, Luis Hender -AzL-, Nalfa Simmarra Cassiani)

En algunas zonas recuerdan que los cimarrones (término colonial para referirse a esclavizados fugitivos) volaban sobre las tierras, combatían tropas y defendían los primeros palenques. El título de esta exposición deriva de un universo alegórico en el que las luciérnagas, o kalabongó en lengua palenquera, son los africanos huidos que luchan con murciélagos-colonos en una batalla en la que la oscuridad es cómplice de la libertad.

Este enfrentamiento sucede en una dimensión que atraviesa los tres mundos concebidos por la comunidad del Palenque de Benkos —también conocido como Palenque de San Basilio—: el mundo del más allá, donde habitan los muertos; el más acá, mundo de los vivos; y el del Mohán o Mohana, un ser liminar que habita los cuerpos de agua, entre los mundos de vivos y muertos, que puede tomar la forma de una persona conocida para llevarse a su víctima, y ser aterrador o agraciado según su estado de ánimo y propósito.

En 2018 el fotógrafo Jorge Panchoaga fue por primera vez a Palenque, y desde entonces ha regresado múltiples veces y colaborado de distintas formas con la comunidad. A partir de conversaciones en relación con sus historias, religiosidad e imaginación, Panchoaga elaboró una travesía visual por la memoria y cotidianidad del primer pueblo libre de América, liberado por Benkos Biohó en 1605. Interlocutores claves han sido colectivos de comunicaciones como Kuchá Suto, Influencers Étnicos o AfroRock, que por décadas han encontrado en los medios de comunicación vehículos para salvaguardar la cultura local, tanto desde el registro de la memoria oral de los mayores como desde la actualización de significados y valores culturales mediante la música, la radio comunitaria, la fotografía, la creación audiovisual y las redes sociales. Varios integrantes de estos grupos conforman Konda Ku Monikongo, cuyo nombre en lengua palenquera significa “contar con imágenes”.

En el mundo espiritual de Palenque, Konda Ku Monikongo se ha interesado en la figura ambigua del Mohán, ese ser que es al tiempo humano y animal, masculino o femenino, muchos o solo uno. En la exposición, el Mohán separa los mundos desde el borde de las aguas, las luciérnagas y los murciélagos habitan los aires, y en tierra firme estamos los humanos, junto con ancestros y otros seres, siendo actores y testigos del devenir de la historia.

Kalabongó pregunta por el sentido de las imágenes para una sociedad, y de las prácticas artísticas como herramientas para la acción política, la reivindicación histórica, y la recuperación y reconstrucción de saberes locales vinculados con cosmogonías ancestrales. Las obras de esta exposición se mueven en un terreno fangoso en que lo documental y lo místico tienen límites difusos; todas ellas son resultado de procesos colaborativos, comunitarios y de largo aliento, en las que la figura del artista como creador autónomo y la obra de arte como expresión de la subjetividad se diluyen —aunque sin desaparecer completamente— en la construcción de imaginarios colectivos.