Tapia en la sabana

Juan Cárdenas (1939), artista payanés, se formó en la Escuela de Diseño de Rhode Island y allí expuso por primera vez sus trabajos. En 1965 regresó a Colombia como caricaturista para los periódicos El Tiempo, El espacio y La República, y como profesor de dibujo y pintura en la Universidad de los Andes. Sus viñetas le traerían uno que otro problema, entre ellos el de ser encarcelado en 1966 por un “delito de lesa patria al haber profanado el Escudo Nacional” con cocaína. Aunque la asociación era sencilla y se hallaba sustentada en la relación entre la bonanza narcótica y la escena política de entonces, ni la libertad de prensa pudo salvarlo. Tras ello llegaron sus primeras exposiciones nacionales, y en 1971 fue parte de la I Bienal de Artes Gráficas del Museo La Tertulia en Cali. En 1973, cuando realizó Regalía, ya había orientado su obra hacia la exploración de la figura humana y el autorretrato, género con el que obtuvo el primer premio en pintura del XXV Salón Nacional de Artistas (1974). Sus obras logran un equilibrio entre la figuración casi onírica y la abstracción geométrica, en ellas los personajes son contemplativos, están suspendidos en una atmósfera velada por la inminencia. Él mismo mira fijamente al espectador en sus autorretratos, como si lo detallara para pintarlo y como si al mismo tiempo quisiera invertir aquella jerarquía visual que sitúa lo que es ilusorio dentro del marco, y lo que es real, fuera de él.